Un Hombre Llamado X

martes, junio 06, 2006

Fronteras y banderas

Hay cosas con las que nunca he podido transigir y desde niño vengo tratando de comprender, y cuanto más profundizo, más me refuerzo en mis planteamientos, y una de ellas son las fronteras y otra las banderas.

Si te paras a pensar, desde niño nos inculcan un sentimiento patriótico de pertenencia e identificación a un territorio llamado... España en este caso, sin embargo, si nos fijamos esto es puramente casualidad pues pudimos haber sido paridos en cualquier lugar del mundo. De hecho, en mi caso, aunque mis progenitores son ambos de una ciudad, yo nací en otra por el desplazamiento profesional temporal de mi padre. Pues como digo, si es casual, ¿por que debe ser un estigma que sea grabado a sangre y fuego para toda la vida?

Las fronteras tuvieron su razón de ser por las diferentes guerras históricas y los sucesivos intentos de dominación que a lo largo de la historia han tenido lugar y es comprensible que hayan existido, pero en pleno siglo XXI creo que en muchas zonas del planeta, tenemos estructuras suficientemente sólidas y avanzadas para que esto no sea sino un símbolo que arrastramos.

Y como siempre me mojo, lo haré hoy también. ¿Por que debo menospreciar a alguien por haber nacido en Marruecos, Senegal o Liberia? ¿Por que me debo sentir superior a él si lo único que nos diferencia son el color de la piel, el idioma y el lugar de nacimiento, y dentro de ambos puede haber la misma inteligencia, las mismas percepciones, salvando las distancias culturales, y los mismos sueños y ambiciones? ¿Por qué se debe sentir inferior al llegar a nuestro país? ¿Por qué debe tener menos derechos que yo cuando vive en España por el simple hecho de no haber nacido aquí? ¿Acaso su esfuerzo, su inteligencia, su respiración, o sus vivencias son de menos calidad que las mías? Simplemente me parece un sentimiento fascista impresentable en una sociedad que presume de moderna y avanzada.

Abajo las fronteras, y si hay que mantenerlas porque en algunos lugares del mundo aun no hay suficientes desarrollos culturales para hacerlas desaparecer definitivamente, al menos no seamos tan cavernícolas como para discriminar a las personas por su pasaporte cuando llegan a nuestro país.

Abajo las banderas y los símbolos discriminatorios que no hacen sino marcar a unas personas como pertenecientes a un club superior y por defecto al resto como inferiores, insisto no son sino símbolos fascistas para una segregación de las personas.